miércoles, 13 de julio de 2011

Adiós GILITO

Hace una semana que enterramos a un amigo. Quizá debería escribirlo así AMIGO. Quizá para algunos solo fuera alguien mas a quien veía de vez en cuando en el bar. Quizá solo fuera, para algunos el tipo raro que le hacia los recados al del bar. Quizá algunos piensen que para mi era eso, el que me hacia los recados.

No voy a intentar en cuatro lineas de mierda explicar lo que Gilito era para mi. Quien no nos haya visto todos los días de estos últimos cinco años no va a poder entender lo que yo sentía por el, y espero que el sintiera por mi. Quien no nos haya podido escuchar las conversaciones telefónicas que manteníamos mientras a estaba en el hospital, quien no me haya visto llorar como un niño cada vez que el me llamaba para darme una mala noticia, pero con una sonrisa en los labios; quien no haya visto todo eso, y no lo ha visto nadie, no puede imaginarse el vacío que queda en mi alma al comprobar que cuando vuelva a llamar a mi amigo por teléfono no me va a contestar el. Al saber que no me voy a poder meter mas con el. Al saber que no le voy a poder insultar de la manera que lo hacia. Al saber que no me va a poderr mandar a la mierda. Al saber que no se va a poder enfadar conmigo cuando lleve media tranca.

Una vez nos enfadamos, y no me acuerdo por que; pero de lo que si que me acuerdo fue de que lo llame para pedirle disculpas por lo que fuera que le había enfadado. Y me dio igual lo que fuera. Y me perdono. Y me alegre. A lo mejor la culpa era de el. Me da igual. Me perdono.

Se que a lo mejor estas letras solo las entiendo yo. Me da igual. Se por que lo hago.

El jueves te hacen una misa. No voy a ir. Te haré una yo. Como el día después de tu muerte, que te dedique un día entero de barón rojo.


Te daré la despedida que tu y yo usábamos siempre. Gilito, me cago en tu puta madre. Te quiero AMIIGO, y si es verdad que hay algo mas, espero encontrarte en un sitio privilegiado, y que me guardes espacio para mi y los míos. Te quiero